Radio Progreso Honduras

El consejo Presbiteral de la Diócesis de Trujillo difundió un comunicado donde hacen varias aclaraciones sobre la “Serie de Investigación” publicada por diario La Prensa sobre el conflicto agrario en el Bajo Aguán, la creación de una célula guerrillera en el sector y el vínculo con varios sindicalistas y grupos religiosos. En el comunicado también piden a las autoridades militares hacer un informe sobre las víctimas y los responsables de los hechos sangrientos producidos en este conflicto.

Las aclaraciones de los sacerdotes de aquella región, son en base a algunos fragmentos del reportaje emitido por el impreso sampedrano el pasado lunes 1 de marzo, para el cual el medio de comunicación usó como fuente un supuesto informe de inteligencia militar.

Refiriéndose “al apoyo y adoctrinamiento de los grupos campesinos armados que tienen tomadas varias fincas de palma africana en el Bajo Aguán”, el reportaje indica, “una estructura montada en la región que va desde organizaciones no gubernamentales de corte socialista, sacerdotes de la orden de los jesuitas que pregonan la teología de la liberación en cada comunidad, dirigentes magisteriales y maestros radicales de izquierda, hasta medios de comunicación locales parcializados con las ideologías comunistas”.

Agrega la supuesta investigación periodística, “es importante recalcar que la orden católica dominante en el departamento es la jesuita, adeptos a la teología de la liberación, la cual es una visión marxista del evangelio. De esta orden han salido todos los sacerdotes guerrilleros de la Iglesia incluyendo a Guadalupe Carney”.

Ante semejantes aseveraciones, el comunicado del Presbiterio, aclara que, “los jesuitas han acompañado a las familias más pobres del Departamento de Colón, que en su mayoría coinciden con la población campesina, para ayudarles en la defensa de sus derechos y para alcanzar las metas de su propio desarrollo”, agrega que este trabajo de los sacerdotes se debe a, “la opción preferencial por los pobres que la Iglesia en América Latina ha hecho desde hace varias décadas”.

En el comunicado, además de aclarar los puntos anteriores también solicita a las autoridades militares y policiales realizar un informe sobre las víctimas mortales que ha habido hasta el momento como consecuencia del conflicto en el Bajo Aguán y que justifique ¿cómo un supuesto documento interno y desactualizado pudo trascender a un medio de comunicación?, entre otros aspectos.

“La Iglesia Católica defiende la vida y la dignidad de todo ser humano. Rechaza, por tanto cualquier forma de violencia y también cualquier juicio que, sin apegarse a la verdad, pueda difamar o desacreditar a las personas y a las instituciones. Será deseable, si este informe militar es auténtico, que las Autoridades Militares revisen y actualicen sus informaciones”, dice textualmente el comunicado enviado por la Diócesis de Trujillo en el epílogo del documento.