Radio Progreso Honduras

Carlos Amaya, aspirante a designado presidencial dijo que el diálogo instaurado con miembros de la Organización de Estados Americanos, OEA, que comenzó la semana pasada en Tegucigalpa. “Es una farsa, un juego con el que los golpistas pretenden ir ganando tiempo para llegar a las elecciones con o sin participación de la gente y de esa manera hacer borrón y cuenta nueva”, dijo Reyes.

Para Amaya lo que actualmente está pasando en el país, es una campaña mediática, irreal para la población, “ya que los candidatos no pueden salir a hablar con la población”, porque son rechazados.

Además de seguir con canciones y slogan que no solucionan los enormes problemas que enfrenta el país, y con eso “están avalando el golpe de Estado”.

El aspirante a designado, indicó que, este cargo público, derogado y nuevamente aprobado, es un puesto decorativo en Honduras, pues “estamos acostumbrados al caciquismo”, además de estar en el olvido para las democracias modernas.

Amaya reconoce que el diálogo es efectivo, sin embargo asegura que este régimen de facto tiene doble cara, por un lado abrió tarde las puertas a la comisión de la OEA, mientras reprimía y lanzaba decretos violatorios a las garantías individuales de las personas que se mantienen en resistencia, sin contar que “en la mesa de negociaciones el Frente no es un interlocutor activo”.

Este dirigente popular, reconocido por su historial organizativo, asegura que no es pecado hablar de Constituyente y que la solución para Honduras, pasa por un verdadero “pacto social”, que garantice la igualdad, además de enfatizar que ellos (candidatos independientes y miembros de la resistencia),

“no están dispuestos a renunciar a una Asamblea Nacional Constituyente.”